Carolina - (excitándose poco a poco) Esperaba esta visita desde que inicié el pleito. Un pleito muy largo, que les ata de pies y manos. Sabía que ibas a venir a implorar clemencia, pero no creí que fuera tan pronto. Exigiré una rendición sin condiciones. Se acabarán las reformas, las protestas, las huelgas... Es el triunfo total de los Tuser, el mío..., ¡el tuyo, Juan!
Luisa - Carolina, por Dios, ¿qué te ocurre?...
Carolina - Déjame. Vete. Es mi vergüenza, es mi victoria. Debo recogerla yo sola...
Hola Ismael soy Natalia y veo que lo as copiado tambien tu diálogo y no entiendo mucho las palabras asique no lo e podido entender leer tanto
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